En la cumbre de la Organización de los Países Exportadores de Petróleo (OPEP) que se celebró en Viena, se decidió que se dejará que el mercado actúe y equilibre la baja del precio del petróleo.
En dicha cumbre, se acordó que los productores mantendrán la cuota de producción de 30 millones de barriles diarios y esperarán que los mecanismos del mercado actúen. La reacción inmediata fue que la cotización del crudo Brent se redujo 6,50 dólares, que fue la mayor caída de mayo del 2011, llegando así al nuevo mínimo en cuatro años: 71,25 dólares.
Asimismo, la postura que ha tomado la OPEP con respecto a la caída de los precios parece dar indicios de un cambio de paradigma como indicó Harry Tchilinguirian, jefe de los analistas de materias primas de BNP Paribas: “Parece que la OPEP quiere abandonar el papel del cartel que calibra la oferta para equilibrar el mercado. Se encontraba frente a una encrucijada: recortar la producción para que los precios suban, creando ;sin embargo, nuevos estímulos a la producción estadounidense; o no alterar la situación actual para que el precio siga cayendo la costosa producción no convencional de EEUU deje de ser rentable.”
Los que están afrontando las consecuencias son principalmente las petroleras: Exxon y Chevron (las mayores de EEUU) perdieron respectivamente un 3,37% y un 3,41% en la Bolsa de Nueva York; Shell (la principal compañía europea) bajó un 2,15% en el parqué de Amsterdamm, y la italiana ENI un 2,72% en Milán. El peor resultado fue el de la Noruega Statoil, que arrojó una caída del 7,34% en la Bolsa de Oslo. En conjunto, el índice europeo del sector, el Stoxx 600 Oil & Gas, cayó un 4%, la mayor reducción desde 2011. La española Repsol sólo se dejó el 0,66%.
La decisión de la OPEP repercutió también en el mercado de divisas. El rublo bajó un 3,36% ante el dólar y el 2,91% frente el euro. El Banco Central de Rusia fijó las cotizaciones oficiales, que entrarán en vigor a partir de hoy, en 49,32 rublos por dólar y 61,41 rublos por euro. Asimismo, el Gobierno de Moscú corrigió a la baja sus previsiones sobre el precio del crudo. También el bono venezolano denominado en dólares cayó un 0,41%, hasta los 55,93 céntimos por dólar.
Sin embargo, esta caída de los precios tuvo también consecuencias positivas en las aerolíneas: las principales compañías cotizaron al alza, como Air France-KLM, Air China, Lufthansa, Ryanair e IAG.
Fuente: EL País