Según datos del INEI, el empleo adecuado se elevó 2,3% entre febrero y abril en Lima. Sin embargo, para la CEPAL y la OIT, la situación real del mercado laboral no ha mejorado.
Según la Comisión Económica Para América Latina y el Caribe (CEPAL), en base a datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la amplia informalidad que aún persiste en el mercado laboral peruano no permite que las condiciones laborales en nuestro país mejoren.
Esto no es lo que reporta el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), que de acuerdo a la información brindada en su Informe Técnico para el mes de mayo del presente año, el empleo adecuado ha logrado avanzar en un 2,3% respecto a al mismo trimestre móvil del año anterior para la población de Lima Metropolitana. Además de esto, hubo una disminución de 4% en cuanto a la población subempleada respecto al periodo similar el año pasado (70 mil personas aproximadamente). Así, personas con empleo adecuado sumaron 2 millones 968 mil 800 personas, lo que equivale al 59,4% de la Población Económicamente Activa (PEA). Cabe mencionar también que respecto a la categoría sexo, el INEI estima que el grupo de mujeres con empleo adecuado aumentó en más de 2.5 veces que el de los hombres (49.100 mujeres frente a 18.200) varones, datos que suenan muy alentadores.
Sin embargo, según el informe de la CEPAL, aún existe un gran problema dentro del mercado laboral peruano, y es la creciente informalidad. Aproximadamente 35% de la PEA pertenece al grupo de trabajadores independientes, porcentaje poco alentador frente a 25% o menos de otros países en Latinoamérica. En la publicación de la institución de las Naciones Unidas con sede en Chile se detalla que la “magnitud de la informalidad aumenta cuando se incluyen el empleo independiente, el trabajo doméstico y el que desempeñan los trabajadores familiares auxiliares”.
Dichos datos, aunque contraproducentes indican una falta de medidas que permitan mejorar la calidad del mercado laboral peruano, especialmente en temas de capacitación y disminución de la informalidad. Posiblemente, esto será aún persistente hasta que se encuentren mecanismos que permitan acceder a un empleo formal con niveles educativos aceptables.
Fuente: «elcomercio.pe», «gestion.pe»