Beijing.- China ablandará las restricciones de planificación familiar que ha a moldeado su sociedad por aproximadamente 35 años. Así lo anunció el ruling Partido Comunista Chino (PCC) el jueves en un intento por mejorar el actual encogimiento de su fuerza laboral y conducir una transición nacional a una era de lento crecimiento económico.
El Comité Central del PCC aprobó los planes que pemitirán a las parejas chinas tener dos niño. Fue informada a través de un comunicado emitido el día de hoy jueves. Esta decisión surge como resultado de la reunión de 4 días que sostuvieron las autoridades encargadas de diseñar políticas en Beijing. La medida referida que de alguna manera ya era esperada surge luego de esfuerzos previos para relajar las políticas que no alcanzaron las metas de 2 millones de nacimientos por año.
Esta política es la mayor liberación de las restricciones de planeamiento familiar chinas ya relajadas a finales de 2013 cuando Beijing dijo que permitirían a más familias tener dos hijos cuando los padres cumplan ciertas condiciones mínimas. Consistían principalmente en que los padres no tengan hermanos.
«Esto muestra que el PCC quiere tomar acción tan pronto como sea posible, y mostrar que no hay tiempo que perder para que China modifique sus políticas de control poblacional», dijo Wang Yukai, un profesor de la Chinese Academy of Governance. «Ellos no podían esperar que la legislación pase al próximo año . Los líderes quieren la nueva política ahora».
Esta línea de cambios son parte del nuevo plan de cinco años del presidente chino Xi Jinping para reordenar el lento crecimiento económico por un crecimiento más balanceado. Este nuevo esquema de trabajo representa la mejor oportunidad del presidente para implementar reformas tanto políticas como sociales. Lo mostró desde que asumió el poder en 2012 y evitó caer en el estancamiento que presentaba la trampa de ingresos medios.
La política de «un hijo», que limitaba a las parejas de uno o dos niños dependiendo de su lugar de residencia o su origen étnico, era la piedra angular de los esfuerzos del último líder Deng Xiaoping para revisar la economía. Cuando la medida fue adoptada hace 36 años, el pensamiento general era que la tasa de nacimientos de aproximadamente 3 niños por mujer era un lastre para el crecimiento.
La cuña ha sido desde entonces modificada y relajada, así como la petición para quitarla completamente ha ido ganando fuerza frente a la caída de la tasa de fertilidad y la erosionada condición actual de la mano de obra china. La edad de la población china en edad de trabajo cayó por primera vez el año pasado; debido a la desaceleración económica. Siendo un símil de la recesión japonesa de finales de la década de 1990.
Luego de mantener un largo tiempo desalentando a su población a tener más hijos; el reto para el gobierno ahora es el de cambiar el pensamiento de los potenciales padres preocupados principalmente por los costos de expandir sus familias. Solo 1.1 millones de las 11 millones de parejas elegibles para tener un segundo hijo bajo la anterior legislación en diciembre del 2013 solicitaron un permiso de acuerdo a la agencia de noticias Xinhua.
A través de medidas como esta, China está buscando completar su transición de una economía en desarrollo altamente dependiente de inversiones y exportaciones en una «sociedad moderadamente próspera» con una economía impulsada principalmente por servicios, gastos de consumo e innovación. Xi ha dicho que China necesita aceptar su nuevo contexto de más lenta expansión como un «nuevo normal» luego de tres décadas con un crecimiento promedio de 10 por ciento.
Fuentes:
CBS,
LeMonde,
