Para el Gobierno peruano, a pesar de que el Coronavirus signifique un estado de emergencia, el país que no tenga un sistema de salud adecuado, cuenta con una estabilidad y ventaja macroeconómica que le brinda las herramientas necesarias para reaccionar en comparación con los otros países de la zona. Esta ventaja es la que se debería de aprovechar al máximo para implementar una respuesta rápida y decisiva con la finalidad de aplanar la curva de los infectados con COVID-19, lo ideal es acercarnos a la curva celeste.
Recordemos que el último registro en torno a los casos por coronavirus (Covid-19) en el Perú, dado el día 17 de marzo, confirmó la cifra de 117 resultados positivos por COVID-19. Los casos detectados se concentran en Lima (70), Callao (2), Huánuco (2), Arequipa (2), Piura (2), Chincha (1), Cusco (1) y Chiclayo (1), etc., según datos oficiales del Ministerio de Salud. Todos se encuentran en aislamiento. Un análisis alentador ante esta situación es la que público en su artículo titulado “ Sobre el Coronavirus y las crisis económicas”.
Las implicancias del Coronavirus son tanto malas como buenas, según el artículo de Roberto Chang. El primer efecto está relacionado con el sistema de salud que entro en jaque al enfrentar esta situación de emergencia extrema y nuestro país no es la excepción, pues la infraestructura de los hospitales y centros de salud son deficientes. Así mismo, no se contaba con un plan de contingencia ante una posible pandemia mundial, la cual hubiera servido de guía para las medidas que se debían implementar de manera inmediata. El segundo punto, se podrían atribuir al aspecto macroeconómico, si bien el Perú actualmente, se caracteriza por una situación de deuda externa muy baja, se encuentra en equilibrio fiscal, la inflación ha estado controlada, y por poseer fuertes reservas internacionales. Todo lo mencionado, anteriormente, brinda al gobierno de Vizcarra una ventaja para reaccionar a comparación de los otros países de la zona. Esta ventaja es la que se debería de aprovecha al máximo para implementar una respuesta rápida y decisiva con la finalidad de aplanar la curva de los infectados con COVID-19, lo ideal es acercarnos a la curva celeste.
EL PERÚ EN FASE 3 DEL CORONAVIRUS
En las declaraciones brindadas, el día de hoy, por el presidente Vizcarra nos informó que el coronavirus se encuentra en fase 3; es decir, empezó el contagio comunitario, el cual es contraído entre los ciudadanos sin necesidad de estar en contacto con otro extranjero. Por ello, el presidente hizo un llamado a todos los ciudadanos a seguir cumpliendo con responsabilidad el periodo de aislamiento social obligatorio para evitar la propagación del coronavirus. Además, las autoridades sanitarias recomiendan endurecer las medidas e implementar periodos de cuarentena para debilitar el avance del virus y así evitar, también, el contagio exponencial que es una transmisión sostenida en el país, que es la fase 4.
CUMPLAMOS LAS RECOMENDACIONES
Que nuestra voluntad como ciudadanos sea más grande y así lograr el bien común. Debemos seguir cumpliendo con las medidas establecidas por el gobierno de mantenernos en aislamiento para proteger de esa manera a nuestros miembros que son vulnerables: niños menores de 5 años y adultos mayores. Estos esfuerzos de mitigación mantienen a las personas más separadas, haciendo que cada oportunidad de transmisión sea marginalmente menos probable. El efecto que se logra es ralentiza la propagación del virus. Un claro ejemplo de proteger a las personas más vulnerables lo está haciendo el estado de Washington que es limitar a los visitantes a hogares de ancianos.
Fuentes:
Foco Economico (1)
Perú 21 (2)
La Republica (3)
The New York Times (4)
