La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en su reciente informe de Perspectivas Económicas, ha mejorado sus proyecciones en cuanto al impacto económico del Covid-19 y prevé que el PIB mundial llegará a niveles pre-pandemia a finales de 2021.
La OCDE proyecta que el Producto mundial aumentará alrededor de 4,2% en el 2021 y 3,7% en el 2022, recuperando así sus niveles pre-covid. La organización internacional basa esta mejora de sus estimaciones en el desarrollo de una vacuna contra el COVID-19, las políticas fiscales y monetarias tomadas por los países y en el impacto que China puede generar en el desarrollo del comercio mundial el próximo año.
La organización todavía pronostica que el producto interno bruto mundial se contraerá en un 4.2% el 2020. Esta recesión será la más dura desde la Gran Depresión, pero esto pudo haber sido peor, señalan. Entre las proyecciones de las grandes economías, las que más verían afectado su PBI son Argentina, con una reducción de un 12.9%, España, con un -11.6, y Reino Unido, con un -11.2%. Caso aparte es el de China; se prevé que se expandirá en un 1.8% este año, único país en presentar un crecimiento el 2020, y un 8% en el 2021, un tercio del crecimiento económico mundial proyectado.
Fuente: OCDE/Expansion
El informe señala, además, cuán diferentes han sido los efectos del impacto económico en la vida de las personas y la sociedad en general. Los efectos de esta crisis apenas afectaron el número de horas trabajadas. La situación fue mucho peor para los vendedores, obreros, y trabajadores de sectores fuertemente ligados al turismo. El impacto en los más pobres ha sido desastroso; el Banco Mundial ha pronosticado que entre 88 y 115 millones de personas pueden acabar en la pobreza extrema este año.
La OCDE señala que lo más importante para una rápida y no traumática recuperación económica pasa por restaurar la confianza de las economías, y de la población en general, introduciendo y distribuyendo la vacuna lo más rápidamente posible a nivel mundial, pero, además de esto, señala, se necesita mantener el apoyo a la política monetaria y fiscal y no refugiarse en el proteccionismo.
Fuentes:
Deutsche Welle (1)
Expansión (2)
Semana Económica(3)
OCDE (4)
