Argentina se convirtió en el campeón de la Copa del Mundo Qatar 2022, con lo cual es la tercera vez en la historia de los mundiales que Argentina alcanza dicho logro. Al igual que en las otras dos ocasiones en las cuales Argentina ganó un mundial, 1978 y 1986, la inflación fue uno de los principales problemas económicos que atravesaba el país; a pesar de ello, estaba allí el futbol contribuyendo económicamente al país.
Históricamente, Argentina se ha caracterizado, no solo por haber tenido a los mejores jugadores de futbol a nivel mundial, como Maradona en su momento o ahora con Messi, sino también porque el fútbol forma parte de la cultura argentina. El futbol está tan impregnado en la sociedad argentina que no solo ha influido socialmente, sino también económicamente. Asimismo, a lo largo de los mundiales en los cuales Argentina ganó la Copa del Mundo, la inflación estuvo allí presente, como un fiel seguidor que acompaña a su selección en los malos y, sobre todo, en los buenos momentos. Es así que se observa una especie de relación “santa y divina” entre la economía, el futbol y la inflación en Argentina.
En primer lugar, el futbol en Argentina mueve muchos recursos económicos y sus efectos, tanto directos como indirectos, sobre la economía argentina pueden ser variados. Solamente empecemos mencionando que la actual selección argentina, para este última Copa del Mundo era la séptima selección más valiosa económicamente, con un valor de aproximadamente 650 millones de euros1. Asimismo, como señala Ariel Coremberg (UBA), director del Centro de Estudios de la Productividad Arklems + Land, uno de los principales efectos directos sobre la economía se da a través de los clubes y con sectores asociados2.
Con respecto a los clubes, las actividades deportivas, sociales y culturales que realizan tales como servicios educativos, apoyo escolar, actividades recreativas y artísticas contribuyen a la actividad económica, el empleo y la recaudación impositiva. Por ejemplo: “Por cada peso de facturación en los clubes, hay 3,7 pesos generados en negocios asociados al futbol”3. Además, dichas actividades que realizan los clubes ocasionan un efecto sobre el stock de capital del país a través de la inversión en infraestructura. Asimismo, es importante señalar la inversión que realizan los clubes en la formación de capital humano, el cual es el principal activo intangible de los clubes de futbol.
En segundo lugar, Coremberg menciona que los efectos indirectos se dan a través del consumo inducido. Esto se debe a que los salarios y pagos de los puestos de trabajo originados por el futbol y los sectores asociados, tales como indumentaria, turismo, publicidad, medios de comunicación, se vuelcan a la economía en bienes y servicios de consumo4. Es así que tanto estos efectos directos como indirectos pueden llegar a generar un movimiento de alrededor de $102.629 millones en la economía argentina.
Por otra parte, con respecto a la inflación argentina, resulta siendo anecdótico que, lamentablemente, durante las épocas en las cuales la selección argentina ganó la Copa del Mundo, tanto en 1978, 1986 y ahora en el 2022, la tasa de inflación sea una de las más grandes de la región y uno de los principales problemas económicos que aqueja al país. Por ejemplo, para 1978, año en el cual Argentina ganó su primera Copa del Mundo, la tasa de inflación en Argentina fue de 170%, una de las más altas en Iberoamérica, durante aquella época5.
Posteriormente, para 1986, año en el cual Argentina consigue su segunda Copa del Mundo, la tasa de inflación en Argentina fue de 90.10%6, mientras que para el resto de América Latina fue de 65% ese mismo año. Finalmente, en el 2022; es decir, este año, Argentina consigue su tercera Copa del Mundo. Como en las otras dos ocasiones anteriores en las cuales la selección argentina ganó un Mundial, a pesar de que a inicios de los 2000 la tasa de inflación en Argentina no superaba el 30%, hoy en día la inflación argentina ha sido una de las más altas de la región y uno de los más grandes problemas económicos del país, alcanzando una cifra de 92.4% en noviembre del 20227; mientras que para América Latina la tasa de inflación proyectada para este año ha sido tan solo de 12.1%.8
En conclusión, como se ha señalado, hay una cierta relación “santa y divina” entre la economía, el futbol y la inflación en Argentina, ya que como se ha descrito anteriormente en las tres ocasiones en las cuales Argentina ganó una Copa del Mundo, 1978, 1896 y 2022, la tasa de inflación argentina ha sido una de las más altas de Latinoamérica, perjudicando a la economía local.
A pesar de ello, el futbol, ha seguido contribuyendo económicamente al país a través de los efectos directos e indirectos que genera en la economía argentina. Si bien puede ser un “don” o tal vez una “maldición” o tal vez una “condición necesaria” el hecho de que haya un elevada tasa de inflación para que Argentina vuelva a ganar una Copa del Mundo, lo cierto es que el futbol siempre contribuirá al desarrollo económico del país gaucho.
Fuentes:
UNAMGLOBAL(1)
(2) (4) Coremberg, A. (2015). La contribución del futbol a la economía argentina
LA NACIÓN(3)
EL PAÍS(5)
DATOS MUNDIAL(6)
DATOS MACRO(7)
IMF(8)
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