El despido de Tillerson ha provocado una crisis en el gobierno de Trump. Y se cree que la elección de Pompeo significará medidas más severas para América Latina.
El día de ayer, martes 14, se produjo uno de los momentos más fuertes y de crisis en el gobierno de Donald Trump. El presidente optó por despedir a Rex Tillerson y escoger a Mike Pompeo para ser el secretario de Estado de Estados Unidos.
Tillerson, principal diplomático de Estados Unidos, fue ex director ejecutivo de Exxon Mobil por lo que contaba con una gran experiencia con las personas con poder en el Medio Oriente, además conocía a Vladimir Putin gracias a sus intenciones para explorar petróleo en Rusia. Su elección fue poco ortodoxa, pero se pensaba que tenía el peso y experiencia para representar los intereses de Estados Unidos y ,particularmente, de Trump. Sin embargo, a lo largo de su periodo como secretario de Estado existieron diferencias entre él y el presidente. “Rex y yo hemos hablado de esto durante mucho tiempo. Realmente nos llevamos bastante bien, pero discrepamos en algunas cosas”, expresó Trump. Entre estas discrepancias están los temas relacionados a la crisis internacional con Corea del norte; las últimas afirmaciones acerca de la muerte de un espía en territorio inglés provocado, supuestamente, por Rusia; las respuestas de Trump a los actos de violencia de la supremacía blanca en Charlottesville el año pasado; la negativa de Tillerson con respecto a la salida del acuerdo climático de París; y acerca de tomar medidas con respecto al acuerdo nuclear de Irán.
Este despido puede tener un significado estratégico, según un artículo de El País, debido a que en noviembre habrá elecciones, por lo que Trump pretendería reforzar el sector republicano para evitar un freno a sus pretensiones ultranacionalistas.
Por otro lado, ¿quién es Mike Pompeo? Se desempeñó como director de la CIA y según Trump “es la persona adecuada para el trabajo en esta coyuntura crítica”. Además, es un exponente de la línea dura republicana, el cual como director de la CIA mencionó de “riesgos políticos” en América Latina. Por lo que surgen preguntas y preocupaciones si es que ahora en el cargo impulsará sanciones a Venezuela. “Esperamos que el Departamento de Estado tenga una política mucho más efectiva, enérgica y productiva, no solo en Venezuela, sino en Cuba y en la lucha contra las drogas en la región”, sostiene Roger Noriega, jefe de la diplomacia estadounidense para Latinoamérica. Mike Pompeo «parece tener la confianza total del presidente Trump, que es muy importante, lo cual le deja más margen para tomar decisiones y desarrollar políticas hacia la región», sugiere Michael Shifter, presidente del Diálogo Interamericano, un centro de análisis regional de Washington.
Por el momento aún existe duda de lo que pasará con otros altos funcionarios como james Mattis, secretario de defensa, y el secretario del tesoro, Steven Mnuchin que junto a Rex habrían hecho un “pacto suicida” en el que renunciarían si alguno de ellos es despedido por Trump.
Fuentes:
CNBC (1)
El País (1)
New York Times (1)
The Telegraph (1)